Mi tío Juan Vasquez Mejia

Mi querido amigo Juan Vasquez

Ha pasado una semana, de conocer la triste noticia de fallecimiento de mi gran amigo: Juan Vasquez Mejia (victima del coronavirus). Hoy quiero compartir el honor que fue trabajar al lado de un hombre luchador, incansable y ejemplar.

Aquel verano inicio con una nueva aventura en mi vida profesional. Mi traslado al área de transportes llegaba en un momento donde la logística experimentaba cambios importantes. En aquel entonces se incorporaba la tecnología y la sistematización en muchos procesos.

Durante las reuniones de trabajo junto al Jefe de Transportes, siempre existía conflicto con el rol que desempeñaría un hombre de edad avanzada (que con las justas sabia contestar un teléfono) y sus funciones en campo frente a un ordenador de PC.

La profesión original de Juan Vasquez, era de conductor de camión, pero producto de un accidente de campo fue reubicado al puesto de "controlador de transporte" donde las labores son mas administrativas y de coordinación digital. Sin embargo era de mucha utilidad su experiencia y las habilidades de campo que tenia para cumplir con nuestras obligaciones. 

Yo le decía siempre "Mi tío" (Algunos lo conocían como Chespiro, el tío 7 o  simplemente el renegon de Vasquez) 

El destino junto a un "novato" en las operaciones del transporte, pero que dominaba la parte administrativa y un "viejo" con muchos kilómetros de recorrido en tracciones portuarias. Así comenzamos y mejorando nuestras competencias. No voy a negar que era un chiste verlo a "mi tío" frente a una computadora redactando un correo electrónico, utilizando el Whatsapp y utilizar teléfonos táctiles.

"Supervisor de transporte que no maneja... se ríe a carcajadas" 

Mi tío Vasquez me ayudo mucho a mejorar mi rendimiento en las operaciones y me daba ese feedback que yo necesitaba para ordenar mis ideas. Como olvidar sus carcajadas cuando le confesé que yo no sabia manejar. Al final de turno me llevaba en su viejo Volkswagen Jeta y me daba mis clases practicas, donde tenia que perder el miedo a la conducción. 

Jamas me negó un saludo y abrazo fraterno de respeto y admiración y me fue difícil alejarme de mi tío cuando posteriormente me trasladaron a otra área.

Mi tío Juan Vásquez, era un hombre valiente, que mostraba una actitud inspiradora a la hora de trabajar. Era un tipo super positivo y llegaba siempre con su lluvia de ideas para mejorar y ser útil en la empresa.

Quizá muchos no conozcan esta parte de la historia de un trabajador de campo, que llegaba muy temprano y salia ya al anochecer cansado, pero feliz venciendo constantemente a la adversidad de manejar su edad con las nuevas tendencias de un mundo cambiante.

Siento mucho penar con tu partida Juan, pero estoy seguro que no quisieras que llene mi rostro de llanto... Estoy casi seguro que me alentarias a seguir adelante y que conserve tu memoria con alegría y respeto a nuestro Dios todopoderoso que hoy goza de tu compañía.

Descansa en Paz Juan Vasquez Mejia!!